La combinación de técnicas ópticas y genéticas aplicada en roedores apunta a que existe un interruptor cerebral para la agresividad.
THINKSTOCK
Cabe objetar que no es lo mismo una persona que un ratón, y que el estudio de la mente del múrido no es el de la mente humana. Es obvio. Aun así, Mus musculus y Homo sapiens son hijos de la Madre Naturaleza, y grandes porciones del procesamiento perceptivo, conceptual y afectivo son similares en uno y otro. Un mismo proceso de selección evolutiva ha dado forma a ambas especies, cuyo último ancestro común se remonta a más de 75 millones de años. La estructura de sus respectivos cerebros y genomas refleja esta semejanza.
Lo más comentado
Los genes nos impiden desentrañar el origen de la vida y del universo
No, la física cuántica no dice eso
La vistosa nube naranja
El experimento KATRIN consigue acotar la masa del neutrino